El Papa Benedicto XVI sostuvo que la Iglesia Católica no está llamada para combatir sectas, “sino que esa presencia de las sectas o de grupos religiosos nuevos nos tiene que infundir una mayor responsabilidad en revisar qué nos está fallando”, indicó Carlos Aguiar Retes, obispo de Texcoco.
El Papa Benedicto XVI sostuvo que la Iglesia Católica no está llamada para combatir sectas, “sino que esa presencia de las sectas o de grupos religiosos nuevos nos tiene que infundir una mayor responsabilidad en revisar qué nos está fallando”, indicó Carlos Aguiar Retes, obispo de Texcoco.
Es indispensable, planteó Su Santidad, hacer una autocrítica, una autorreflexión para que abramos espacios, caminos y fórmulas nuevas con creatividad, para que los católicos encuentren en la Iglesia mexicana respuestas a esta inquietud, a esa sed de Dios.
Eutanasia Sobre el tema de la eutanasia, el Santo Padre nos convocó a cuidar el valor de la vida, porque los que están en más riesgo son las criaturas que están por nacer y los ancianos, expuso el secretario general del Episcopado.
“La criatura que está por nacer es un ser que aún no puede defenderse, todos nosotros, de alguna manera, nos podemos defender ante los ataque de la vida, pero el ser que está en gestación no se puede defender, no tiene ninguna defensa; quien lo tiene que defender es su propia madre, que lo engendra, que lo gesta. Igual los ancianos”, añadió.
Los ancianos están en grave riesgo porque, como ustedes saben, la evolución y el ciclo de la vida nos dice que el anciano en muchas de las circunstancias vuelve a ser como un niño, recordó monseñor Aguiar Retes en alusión a los mensajes del Papa.
El anciano El anciano vuelve a necesitar de los demás, “está supeditado a los demás, sea por las condiciones físicas e intelectuales, se le deterioran sus condiciones de salud al grado que a veces la sociedad puede decir, éste ya para qué sirve, mejor que desaparezca”, sostuvo el Vicario de Cristo ante los obispos mexicanos.